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Artículo

Miércoles 7 de noviembre de 2018

Los jóvenes y la misión evangelizadora

Tras casi un mes de intenso trabajo entre jóvenes y “Padres Sinodales”, culminó la XV Asamblea Ordinaria de Obispos en Roma, cuyas conclusiones forman un abanico de prioridades para la renovación de la Pastoral Juvenil.

Fotos: Vatican Media - Agencias

Periodista: Enrique Astudillo Baeza - José Francisco Contreras

Fuente: Periódico Encuentro

Link fuente: www.periodicoencuentro.cl

La tarea no era fácil. El Sínodo de Jóvenes en Roma debía por sobre todo comunicar la belleza de una Iglesia que está sufriendo, pero en esa realidad estar atenta a lo que hoy dice el Espíritu frente a la crisis que la afecta.

¿Qué deja este Sínodo de "Jóvenes, fe y Vocación"? En la asamblea culmen del 27 de octubre, el episodio de los discípulos de Emaús fue el hilo conductor del Documento Final, el que, entre otras cosas, pone de relieve materias de carácter preciso y constructivas que van en la "búsqueda de una Iglesia joven, sin miedo, llena de entusiasmo y unida", tal como señala el recién nombrado Prefecto del Dicasterio para la Comunicación, Paolo Ruffini.

Las deliberaciones del sínodo también abordaron temas como el cuerpo, la afectividad, la sexualidad, el desafío digital, el acompañamiento vocacional y el llamado a la santidad, para ofrecer a los jóvenes del mundo un período de maduración hacia la vida cristiana adulta.

Antes de concluir la XV Asamblea Sinodal, el Santo Padre regaló a todos los participantes una baldosa de bronce en bajorrelieve que representa a Jesús y al joven discípulo amado, como signo de cercanía y de trabajo mancomunado por el futuro de la Iglesia.

Corresponsables para evangelizar

El Obispo Auxiliar de Santiago, monseñor Cristian Roncagliolo participó en el sínodo en Roma, donde surgieron propuestas como que los jóvenes sean corresponsables de la vida y de la misión de la Iglesia participando activamente en la misma". Luego, destacó la importancia del discernimiento y la responsabilidad que tiene la Iglesia de ayudar a que cada uno busque la voluntad de Dios, descubra lo que Dios pide a sus hijos, siempre en función de vivir y testimoniar el Evangelio en el contexto actual, según los propios carismas y vocaciones. "Por eso que la sinodalidad y el discernimiento están en función del anuncio gozoso del Evangelio", señaló.

En este periodo post sinodal, la vida de la Iglesia estará marcada por el dinamismo que debe brotar del documento final. Cada Iglesia particular está llamada a descubrir de qué forma aterriza las propuestas, "cómo vamos viviendo la sinodalidad, la misión, el discernimiento, de qué manera nuestra Iglesia se vuelve escuela de comunión, de discernimiento y de misión", señaló monseñor Roncagliolo.

Para esa tarea, lo primero será empaparse de los contenidos del sínodo, una vez que esté lista la versión en castellano del documento final, y cruzarlo con el X Sínodo Arquidiocesano de Santiago, para de ahí sacar las líneas y desafíos concretos para la pastoral.

PUNTOS DESTACADOS DEL DOCUMENTO FINAL DEL SÍNODO

Tres partes, doce capítulos, 167 parrafos y 60 páginas, conforman el documento final de la XV Asamblea, el cual, fue entregado al Papa Francisco para su aprobación y posterior publicación. A continuación una síntesis de las ideas principales de los 364 modos, o enmiendas, del texto:

  1. "Caminaba con ellos": La examinación del contexto en el que viven los jóvenes, sus puntos de fuerza y sus desafíos.
  2. "Compromiso firme contra todo tipo de abuso. Luz en la verdad y pedido de perdón": Amplia reflexión sobre los diferentes tipos de abusos de poder, económicos, de conciencia y sexuales, cometidos por algunos obispos, sacerdotes, religiosos y laicos.
  3. "Los migrantes, paradigma de nuestro tiempo": El tema de los migrantes, como fenómeno estructural y no como una emergencia transitoria.
  4. "La familia como Iglesia doméstica": El papel de los abuelos en la educación religiosa y en la transmisión de la fe.
  5. "Se abrieron los ojos": Los jóvenes como portadores dinámicos y más adelantados que los pastores.
  6. "El acompañamiento": Acompañar como una misión fundamental que la Iglesia debe llevar a cabo a nivel personal y de grupo.
  7. "Sinodalidad, estilo misionero": La sinodalidad como estilo de misión que anime a pasar del yo al nosotros y a considerar la multiplicidad de rostros, sensibilidades, proveniencias y culturas.
  8. "El desafío digital": Un desafío urgente que la Iglesia está llamada a asumir es la misión en el entorno digital.
  9. "Cuerpo, sexualidad y afectividad": Cómo elementos como el cuerpo, la afectividad, la sexualidad, se ven enfrentados ante los avances científicos que plantean cuestiones éticas, fenómenos como la pornografía digital, el turismo sexual, la promiscuidad y el exhibicionismo en línea.
  10. "Acompañamiento vocacional": Una invitación de los Padres Sinodales fue a invertir tiempo y recursos en los jóvenes con la propuesta de ofrecerles un período destinado a la maduración de la vida cristiana adulta.
  11. "Llamados a la santidad": Las diversidades vocacionales están reunidas en la única y universal llamada a la santidad.

"UNA OPORTUNIDAD PARA QUE SE ESCUCHEN VOCES DISTINTAS"

Silvia Retamales, del Observatorio Socio Pastoral de los Jóvenes de Chile, quien participó en la XV Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, fue entrevistada por Vatican News, web oficial de noticias de El Vaticano. Allí la joven abogada resaltó: "El sínodo es un evento que nos conduce hacia la universalidad de la Iglesia y a aprender de otras realidades, ya que ciertos problemas se repiten en los diferentes países (...) Es una buena oportunidad para que los jóvenes podamos manifestar los que pensamos. Los Padres Sinodales han tenido una actitud de escucha ante nuestra opinión, nos han apoyado y fomentado que participemos. También es una oportunidad para que se escuchen voces distintas, para que podamos repensar en nuevas estructuras eclesiales, para que nuestra Iglesia sea más abierta y plural".

Consultada por la situación de la Iglesia en Chile, manifestó al medio vaticano: "En mi país en estos últimos tiempos hemos estado pasando por una situación bastante lamentable. Por un lado veo que ha habido gestos importantes de reconciliación y también de sanción para quienes merecen esas sanciones; y de otro lado veo que debería ser tomado como una oportunidad para repensar algunas estructuras de la Iglesia que quizás pueden fomentar o permitir los abusos; la idea es que no solo sancionemos, sino que también trabajemos en promover los espacios de prevención para que no se repitan estas conductas que dañan a tantos".