Click acá para ir directamente al contenido
Artículo

Domingo 26 de mayo de 2019

Fecundo retiro de catequistas de Santiago

La jornada, que contó con más de 400 catequistas, culminó con una eucaristía presidida por monseñor Celestino Aós, Administrador Apostólico de Santiago.

Fotos: Jorge Salomón

Periodista: Enrique Astudillo Baeza

Fuente: Iglesia de Santiago

Link fuente: www.iglesiadesantiago.cl

Las bajas temperaturas de este sábado 25 de mayo, no fueron impedimento para que cientos de catequistas de Santiago, llegaran hasta el Centro Pastoral de Schoenstatt en La Florida, para tener un momento de encuentro con el Señor y reflexionar sobre la realidad que vive la Iglesia local por estos días.

Bajo la cita "Es preciso nacer de nuevo", catequistas de las vicarias zonales y ambientales, además de representantes de la Delegación para la Familia, movimientos e instituciones de Santiago, se reunieron para buscar nuevos caminos, bajo el amparo de Dios, e impulsos para vivir la fe e identidad de cristianos a la que están llamados.

La masiva jornada estuvo acompañada por el padre Jaime Castellón, SJ, quien se encargó de guiar los momentos de meditación y ayudar a los catequistas a encontrar las respuestas en sus trabajos grupales: "Ha sido una experiencia de Iglesia espectacular. Esta es la iglesia que vive, que ha sido convocada por Jesús en medio de nuestra pequeñez. Estamos poniendo nuestra disposición y eso lo encuentro precioso. En medio de la crisis, es un llamado a salir de nosotros, llevar la alegría del Evangelio. Es verdad, estamos con heridas, pero hay que limpiarse esas heridas para seguir sirviendo al otro", contó el sacerdote jesuita.

El retiro, que contó además con momentos de reflexión personal y de compartir en grupo y en silencio, concluyó con la santa eucaristía, presidida por el obispo Celestino Aós, quien en su homilía, agradeció la inmensa e incansable labor que realizan en parroquias y capillas de Santiago.

"La fe es algo muy extraño y misterioso. Agarraron al buen Jesús, lo apalearon, lo coronaron de espinas, lo escupieron, destrozaron su cuerpo, dijeron que era subversivo, que era un endemoniado. A lo largo del tiempo eso se ha ido repitiendo y hoy día, estamos en la misma. Y el catequista va a tener que estar en esta dinámica, esa es la grandeza de la fe, porque hacer catequesis no es enseñar una serie de conocimientos, es acompañar a ese hermano en su proceso de fe", exhortó.

Tras ello, invitó a los catequistas a pedirle tres dones al Señor: El don de la alegría, el don de respetar a todas las personas y el don de sentir el amor por la comunidad.

El padre Jorge Barros, Director del Departamento de Catequesis de Santiago, añadió: "Hay una gran necesidad de conocer al Señor y profundizar su relación con Él. A eso vienen los catequistas a buscar fuerzas para seguir realizando su gran misión. La visita de monseñor Aós vino a reforzar esa labor que realizan".

"Fue todo maravilloso. Me pareció todo extraordinario. Este es mi segundo año que participo y estoy muy contenta por todo lo que viví. Le doy gracias a Dios por lo de hoy y le pido que siga dando fuerzas a cada uno de nosotros que estamos por todo Santiago realizando esta inmensa labor y doy gracias también por la presencia del obispo que es un honor que comparta con nosotros", extendió Verónica Huerta, catequista de la parroquia Madre de la Divina Providencia en Puente Alto.