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Jueves 12 de junio de 2025

Sacerdotes reflexionan sobre su llamado a la santidad en jornada diocesana

Encuentro por el Día de la Santificación del Clero reunió al presbiterio en torno a la oración, la fraternidad y la reflexión pastoral en el Santuario de Schoenstatt.

Periodista: Nazareth Quezada A.

Este jueves 12 de junio, en el Santuario de Schoenstatt en Bellavista, se celebró el Día de la Santificación del Clero, fiesta litúrgica de Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote. La jornada convocó a numerosos presbíteros de la Arquidiócesis de Santiago para reflexionar en torno a la santidad sacerdotal, bajo el lema: “Como tú me enviaste al mundo, así también yo los envío al mundo” (Jn 17,18).

El encuentro fue animado por el padre Mauricio Labarca y comenzó con la oración de tercias dirigida por el vicario de la zona Maipo, P. Ricardo Acosta. Luego, el arzobispo de Santiago, Monseñor Fernando Chomali, dio la bienvenida a los participantes, destacando la importancia de esta instancia como un tiempo de renovación espiritual y comunitaria para el clero.

La ponencia principal estuvo a cargo de Monseñor Gonzalo Bravo, obispo de San Felipe, quien desarrolló el tema “La santidad sacerdotal en el mundo actual”. En su intervención, Mons. Bravo subrayó que “la santidad no es un ideario solitario, sino un camino solidario, no es individual, sino sinodal”, invitando a los sacerdotes a vivir su vocación no desde el aislamiento, sino en profunda comunión con Dios y con sus hermanos.

“El gran desafío de nuestra vida es no caer en la rutina ni olvidar la fuente: la oración, los sacramentos, la fraternidad y el servicio al pueblo de Dios”, enfatizó el obispo, señalando también que muchas veces las agendas llenas y los corazones vacíos han generado heridas en la Iglesia. “No podemos estar tan cerca de las cosas de Dios y tan lejos del Dios de las cosas”, dijo, provocando un momento de silencio y reflexión entre los presentes.

La jornada continuó con un diálogo en mesas, donde los presbíteros compartieron sus experiencias y desafíos en el camino de la santidad. Estas reflexiones fueron plasmadas en un “Mural de la Santidad”, como ofrenda comunitaria.

Entre los asistentes estuvo el padre Pedro, de la parroquia San Roque y perteneciente a la Congregación de Santa Cruz, quien valoró el encuentro como un espacio profundo y necesario: “Estamos con muchas ganas de compartir y de avanzar en este camino tan lindo como desafiante que es la santidad. Me llevo especialmente la forma en que se expuso el tema: con pedagogía, con recursos que pueden ayudarnos también a comunicar mejor en nuestras parroquias, especialmente con los jóvenes”.

Como signo especial de comunión y envío, durante la adoración al Santísimo, se realizó un gesto significativo: se entregó la cruz del Jubileo a los vicarios de las siete zonas pastorales de Santiago, quienes la recibieron como símbolo del llamado a guiar, acompañar y animar la vida sacerdotal en sus territorios en este tiempo de gracia.