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Jueves 5 de noviembre de 2020

Mes de María Chile: 170 años de tradición mariana

¡Cuántos pololeos, noviazgos y matrimonios tuvieron su origen en las parroquias el siglo pasado en este periodo del año! Entonces, las familias enteras se reunían ante la imagen de la Virgen María y su frente adornada “con guirnaldas y coronas”, porque “el más hermoso adorno de una madre es la piedad de sus hijos”. Las mismas oraciones y cantos tradicionales persisten hoy y se transmiten… online.

Fotos: Nibaldo Pérez

Periodista: José Francisco Contreras

Fuente: Periódico Encuentro

Link fuente: www.periodicoencuentro.cl

Esta devoción a la Madre de Jesucristo se desarrolló en Europa entre los siglos V y XV, en mayo, al inicio de la primavera. En Chile comenzó en 1850. El rector del Seminario Pontificio de Santiago, Joaquín Larraín Gandarillas, después obispo auxiliar de Santiago, probablemente conoció esta costumbre en el Viejo Continente y la trajo, pero para celebrarla del 8 noviembre al 8 de diciembre, con la misma estructura que aún tiene. El padre Gandarillas pensó este mes como una preparación a la proclamación del dogma de la Inmaculada Concepción, del Papa Pío IX, el 8 de diciembre de 1854. Aunque puede ser que hubiera celebraciones marianas antes de esa fecha, en la evangelización hispana.

Es una de las devociones marianas más populares en el país. A mediados del siglo pasado era una tradición muy respetada y concurrida, punto de encuentro de los habitantes de los poblados y campos. El culmen era la procesión del Virgen por las calles del pueblo, el 8 de diciembre, con hermosas andas muy adornadas con flores y papeles de colores. En las últimas décadas se ha replegado a templos y capillas, incluso en las casas, para grupos pequeños. Pero mantiene las tradiciones y los antiguos cantos marianos.

PRIMER MES DE MARÍA ON LINE EN TODA SU HISTORIA

Las circunstancias actuales de la pandemia llevaron a párrocos y fieles a organizar una forma mixta de celebrar este mes: presencial y a través de las redes sociales.

El padre Carlos Godoy, rector del Santuario de la Inmaculada Concepción del Cerro San Cristóbal, explica que de lunes a viernes se rezará el rosario a las 11:30 y a las 12:00 el Mes de María, en la explanada del santuario, de manera presencial, conforme a la normativa vigente. Es decir, un aforo de cien personas para la celebración al aire libre. Pero 300 personas pueden circular por el sector. Los sábados y domingos, rosario a las 11:30 y misa a las 12:00 horas.

En el Santuario de Lourdes, el párroco, padre Pedro Pedraza, señala que el Mes de María será presencial, se rezará todos los días y empezará con el rosario, a las 18:30 horas, y la eucaristía a las 19:00 horas, en la Gruta, con un aforo de cien personas. Además, están celebrando “Los Quince Sábados” de preparación a la Solemnidad de la Inmaculada Concepción, cada sábado a las 08:30 horas, con el rezo del rosario y misa a las 09:00, también en la Gruta. Por otra parte, están Los Momentos Marianos, a las 22:30 horas, a través del Facebook del Santuario de Lourdes, con el Mes de María y una reflexión mariana.

Igualmente, las parroquias celebrarán este mes dedicado a la Virgen de manera presencial, con un aforo según el paso en que esté cada sector, y también vía on line. Es el caso de la parroquia Nuestra Señora del Carmen, de Quilicura, por ejemplo. Allí se rezará el Mes de María a las 19:00 horas, con una capacidad para 50 personas en el templo, y se retransmitirá por Facebook.

En www.iglesiadesantiago.cl se puede encontrar el especial del Mes de María en donde encontrarás recursos pastorales y más información.

EXPERIENCIAS MARIANAS

Mignolle Lepín, casada cuatro hijos, participó varios años en la catequesis familiar en la parroquia Santos Apóstoles de Recoleta y confiesa que va al Mes de María “porque me nace, desde chica he sido bien apegada a la Virgen, hacía mandas, entraba de rodillas. Me gusta y me hace bien, me hace reflexionar. Para mí, es importantísima, porque si ella no hubiese dicho que sí yo no tendría salvación, al encarnarse en ella Jesucristo vino a salvarme la vida. Ella es un modelo de mujer y de humildad. Es una imagen que me llega mucho, porque yo no soy humilde.

El joven Anthony Briceño, de la parroquia San Saturnino, en el barrio Yungay, cuenta que su relación con la Virgen es muy cercana, “porque ha tenido mucha influencia en mi familia, nos ayudó a salir adelante. Fueron momentos difíciles especialmente este año, con el Covid-19, para las familias extranjeras que habitan acá. Mi papá estuvo al borde de quedar en la bancarrota y mi mamá cesante. Entonces he acudido a la Virgen y a Dios para que mejore esta situación. Ella me ha ayudado también a que mi fe crezca cada día más”.