La pastoral es hacer que el otro se sienta amado por Dios

En su exhortación inicial, el Administrador Apostólico motivó a los presentes señalando que "en la comunidad de nuestra Iglesia hay paz y belleza; hay también sombras, hay heridas, hay pecados. Que esta reunión nos lleve a descubrir todavía con más fuerza la paz, la bondad, la belleza de nuestra Iglesia y de nuestro ser Iglesia".

Luego, de cara a una jornada que tiene el tema pastoral como centro, afirmó que "nosotros somos cristianos no porque sepamos una teología, no porque tengamos planes pastorales: somos cristianos porque nos hemos encontrado con una persona, con ese Cristo que nos ama. Cada uno de nosotros tiene esa experiencia, y si no la tiene hay que pedirle al Señor que nos la conceda, de sentirnos amados por el Señor. Y ese es el testimonio que vamos a dar". Agregó que la pastoral es "trabajar para que ese hermano, esa hermana que no ha tenido esta experiencia la tenga, que se sienta amado por el Señor y también amado por nosotros. Deseo que salgamos dispuestos a que otros vivan esta alegría. Después de todo, conocer a Jesús es la gran bendición de nuestra vida".

En la jornada se expuso el trabajo realizado en los encuentros de los consejos pastorales parroquiales, los decanos y los vicarios durante el último mes para ver cómo fue la experiencia práctica de las Acentuaciones Pastorales durante este tiempo. Al comienzo, la asamblea conoció los primeros logros, dificultades y desafíos que se han ido detectando en la aplicación de esas acentuaciones, conforme lo trabajado en esos tres encuentros previos, ya de cara a la labor pastoral de 2020.

En esas reuniones hubo varias constataciones de avances, propuestas y desafíos frente a cada una de ellas. Esas acentuaciones se refieren a la conciencia de ser Pueblo de Dios, la vida comunitaria, la opción por los pobres, la prevención de abusos y reparación a las víctimas y la Iglesia que opta por los jóvenes.

Luego de la presentación de este trabajo, los asistentes se dividieron en siete grupos para responder diversas preguntas, vinculadas con el objetivo de hacer aportes frente a los desafíos del próximo año pastoral.

En esta instancia surgió una serie de propuestas, que deberán ser sistematizadas para su puesta en práctica. Entre las iniciativas figuran la transparencia en el aspecto económico, potenciar los consejos parroquiales pastorales, un apoyo concreto a la vida comunitaria, estar más atentos a descubrir los distintos rostros de pobreza que aparezcan, tener actitudes y actos de apertura hacia los migrantes, seguir insistiendo en la formación a todo nivel en materia de espacios sanos y seguros, además de escuchar y trabajar con los jóvenes y promover el trabajo inter generacional. 

Al término del encuentro, monseñor Aós recordó el mandato evangélico de "Vayan y anuncien el Evangelio", y pidió que, en medio de la realidad actual de crisis, que "es la cruz que nos toca vivir", llevemos la Buena Noticia. "Llévenla con alegría, porque el Papa ha insistido muchas veces que no se puede ser un agente pastoral, un sacerdote, amargado. Pidamos a Dios que nos dé el don de la alegría para disfrutar del ser cristiano".