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Artículo

Jueves 5 de abril de 2018

Cárceles: la deuda histórica

Prisiones donde los reos pasan hasta 16 horas encerrados. Otras 16 horas promedio sin comer. Sólo dos de 53 recintos con agua caliente. Más de la mitad de las cárceles sobrepobladas. ¿Cómo rehabilitar en tan lamentables condiciones? Periódico Encuentro conversó con las principales voces de la Iglesia en Santiago que trabajan en centros de reclusión del país y que durante décadas han ayudado a visibilizar la vulneración de derechos que sufren los privados y privadas de libertad.

Fotos: Nibaldo Pérez

Periodista: Por Natalia Castro Díaz

Fuente: Periódico Encuentro

Link fuente: http://www.periodicoencuentro.cl/abril2018

"El documento que a continuación ponemos en su conocimiento contiene las apreciaciones sobre los problemas que esta Fiscalía considera de mayor relevancia y que requieren preocupación de las autoridades para su pronta solución”.

Así comienza el informe emanado de la Corte Suprema de Justicia en febrero 2018, que da cuenta de los principales problemas de las cárceles chilenas y que pone en evidencia la dramática situación del sistema carcelario chileno. ¿Existe alguna novedad en este documento o se trata de una situación que cientos de informes han denunciado, pero de la que el Estado no ha sido capaz de hacerse cargo?

Padre Nicolás Vial: “Paternitas se va a acabar cuando el Estado se haga cargo de las personas privadas de libertad”

Para el padre Nicolás Vial, presidente de la Fundación Paternitas, que capacita, rehabilita y reinserta a personas privadas de libertad desde hace más de 27 años, hay poco de novedad en este documento: “Aquí hay una situación de negación por decenios, y creemos que no basta que haya un informe para que se supere la problemática. Todos lo sabemos, los parlamentarios, la Iglesia, los ministros y gobiernos de turno. Para mí lo más grave es que los informes se reeditan con cierta regularidad más o menos calcada y luego aparece una pequeña revolución, pero después de dos o tres días, se durmió en el olvido”.

Respecto del rol de la Iglesia, el padre señala: “Como Iglesia, tenemos que seguir mostrando que aquí hay una actitud pecaminosa en seguir manteniendo esta situación flagelante con los presos. El informe no hablaba de la juventud presa y eso es un tema tan grave, quizá más que el de los adultos, la juventud presa ha sido silenciada por las autoridades y es muy severo” e, incluso, realiza una autocrítica agregando que “la Iglesia hace bastante, pero puede hacer mucho más. Tenemos voz y gente muy significativa. Hay voces elocuentes que hay que levantar, la sociedad no puede decir sí ante estas injusticias, porque este es un fracaso de todos”. Junto a lo anterior, Vial da algunas luces con respecto a los pasos a seguir: “Yo creo que es posible hacer una selección del personal, que tenga un espíritu de servidor público verdadero, segundo, en una suerte de encuentro integrado, escuchar cuáles son los sueños de estas personas, y tercero, infraestructura, pero para mí lo primero es la humanidad”.

En materia carcelaria, otro tema que ha generado desacuerdo es la posibilidad de que personas privadas de libertad que cumplan ciertos requisitos de edad y condiciones físicas accedan a beneficios. Al respecto el padre Vial es enfático: “Estar en contra de esto es ignorancia, porque dentro de la ley se establecen ciertos parámetros que el interno debe cumplir; cumpliéndolos se habla de un hombre o mujer caminando hacia la sociedad responsable. Si los cumplió, ¿por qué no se le va a dar el beneficio? Si hay una ley, no entiendo por qué entonces después se borra con el puño”.

“La cárcel es tóxica desde que se llega hasta que se sale. Así como hay un libro de Guinness, debería haber un libro en donde se denuncien en forma internacional los países que son atropelladores de los derechos humanos, los países que aunque se viva en democracia, son torturadores, y Chile es ese caso, donde se da un trato degradante, inhumano y debería tener sanciones”.

Por ello el padre Vial sugiere salidas alternativas a la cárcel ante delitos menores: “Lo peor es una larguísima condena donde no tenga aproximaciones a la comunidad. La mejor condena debiera ser fuera de la cárcel, entre la sociedad, como trabajamos en Paternitas. Acá nos derivan y hacemos un proceso de humanización, acá no hay celdas y tenemos un éxito de reinserción de un 70%”.

 

Un chef en potencia

Sebastián es uno de los reclusos que atiende la Fundación Paternitas y se está capacitando en gastronomía para comenzar a trabajar en el rubro. Su infancia está cruzada por la precariedad y falta de redes familiares.

“La gente no ve la oportunidad que uno quiere de la vida, porque la vida ya nos ha tratado mal, uno quiere empezar a hacer las cosas bien. Yo tenía escasez de recursos, andaba en la calle y empecé a sacar cosas de los supermercados y, de a poco, vas escalando y cada vez es más grave el delito, pero ya cuando tienes una familia y ves que tendrás plata, pero no estarás con tu hijo o tu esposa, te das cuenta que vas a perder todos esos años y no los vas a recuperar nunca”, comenta.

“Esto me ha gustado mucho, me enseñan de cocina y a mí me gusta la cocina desde siempre.

Acá te preparan, te dan una oportunidad real de insertarte en la sociedad, porque después te buscan un trabajo, te motivan, te enseñan la puntualidad y responsabilidad y nos controlan el tema de las adicciones”, reflexiona Sebastián sobre su paso por Paternitas.

Respecto de su futuro, Sebastián lo vislumbra con buenos ojos: “Mis expectativas son emprender, hacer mi propio negocio en el rubro gastronómico. Me quiero especializar en la gastronomía chilena, también me gustaría estudiar. Yo en Colina 2 terminé mi cuarto medio y le tomé más el gusto al estudio, salí con un 5,9”.

 

Hermana Nelly León: “La gente delinque por mucha rabia, por mucho odio, la televisión nos vende una sociedad feliz, a la cual yo no tengo acceso porque no tengo plata”

En su reciente visita a Chile, el Papa Francisco se reunió con mujeres privadas de libertad de la cárcel de San Joaquín. En la oportunidad, las mujeres le pidieron al Sumo Pontífice interceder por ellas para que se extendiera en un año más la estada de los niños con sus madres, que actualmente es hasta los dos años de edad.

La hermana Nelly León, capellán del centro de reclusión, señala que eso quedó introducido en el gobierno de Michelle Bachelet, pero no definido y que aún no han podido reunirse con la nueva administración para saber si se avanzará en este tema puntual.

León agrega que para superar parte de los problemas que viven las mujeres privadas de libertad, se debe “seguir profundizando una política de género y de reinserción que estaba trabajando el Ministerio durante el gobierno pasado. Lo primero, porque el encarcelamiento es diferente a como lo vive un hombre. Lo asociado que tiene la cárcel para una mujer es que ella sigue siendo madre ahí dentro, y por eso debería trabajarse y mirarse, en especial en las mujeres que tienen hijos bajo su cuidado, porque también hay mujeres que tienen seis hijos, pero no tienen ninguno bajo su cuidado, porque están en el Sename”.

Junto a lo anterior, la hermana Nelly pone el foco en “las mujeres adultas mayores que están muy maltratadas por la vida, con muchas enfermedades y muchos dolores y sería bueno que el Estado pusiera una atención en esas mujeres. Que tuvieran mayores beneficios y que quizá pudiera aplicárseles medidas cautelares en algunos casos”.

“Hay que insistir en lo que el Papa dijo, estar privada de libertad no significa estar privada de dignidad. Los presos no cuentan para la votación, los gobiernos se enfocan en mano dura a la delincuencia, más cárceles y los medios de comunicación colaboran mucho con eso, te muestran una sensación de inseguridad tremenda. Falta voluntad política y social”, agrega la hermana.

Además, la religiosa reflexiona en torno al trasfondo de la delincuencia en el contexto de desigualdad que se vive en nuestro país: “Vivimos en una sociedad profundamente injusta, donde los pobres son muy pobres y hay muy pocos ricos. Si tuviéramos una distribución en nuestro país mucho más equitativa de los recursos, yo te aseguro que no habría tanta gente presa, porque la gente delinque por mucha rabia, por mucho odio, la televisión nos vende una sociedad feliz, a la cual yo no tengo acceso porque no tengo plata”.

“Las parroquias preocúpense de cuánta de nuestra gente está presa, vayamos a verlos. Acá en Santiago hay muchas cárceles, contactémonos con el capellán, nosotros como Iglesia tenemos que involucrarnos, pero estamos muy metidos en las parroquias, mientras no tengamos una pastoral de puertas abiertas el espíritu se nos va a secar. Cumplir con el Evangelio: “Estuve preso y me fuiste a ver”.

 

Ejes del Gobierno en materia carcelaria: Reinserción Social

En reinserción social el ministro de Justicia, Hernán Larraín, ha señalado que se creará el nuevo Servicio del Reinserción Social Juvenil y el perfeccionamiento de la actual Ley de Responsabilidad Penal Adolescente. Además, desarrollar políticas de reinserción social en Gendarmería y en Sename.

“Para mejorar nuestro sistema carcelario una primera iniciativa de carácter urgente será avanzar en la mejora de las condiciones de vida de la población penal. Para ello daremos continuidad a un plan de once medidas que se elaboró en el primer gobierno del Presidente Sebastián Piñera, para mejorar cosas tan simples como son los colchones de los internos, por nombrar un ejemplo.  Nuestra intención es fortalecer y actualizar este plan. Enseguida, vamos a hacer un diagnóstico de la infraestructura que tienen hoy las cárceles producto del hacinamiento que existe, motivo por el cual ya le hemos pedido al director de Gendarmería un plan de ampliaciones de los actuales recintos”, señala el ministro Larraín.

 

Gendarmería y Sename

También explica que para Gendarmería se tiene contemplado implementar un nuevo plan de once medidas de cárceles, entre ellas: mejorar las condiciones de vida digna de la población penal; formular diagnóstico de situación de infraestructura e impulsar construcción o ampliación de  cárceles; instalar e implementar la reinserción social como un eje central del trabajo carcelario. La reinserción evita la reincidencia y constituye un formidable mecanismo de prevención de delitos. Otras son: elaborar un proyecto de ley sobre ejecución de penas; nueva formación y capacitación profesional en la Escuela de Gendarmería, e impulsar iniciativas público privadas enfocadas en la rehabilitación y reinserción.

En cuanto al Sename, se avanzará en dar urgencia al despacho de los proyectos de ley que crean el Servicio de Reinserción Juvenil y el de Protección Especializada de Niños y Niñas, formulando modificaciones. Aumento de la subvención para programas residenciales y mayor control en el uso de la subvención, elaborar Plan de Transición, conjuntamente con el Ministerio de Desarrollo Social. Crear sistema de denuncia abierta para evitar abusos y maltrato, y de alerta temprana del sistema. Preparar Plan de Desinternación de niños, niñas y adolescentes, con énfasis en revinculación familiar (propia o extendida), familias de acogida y vía familia adoptiva.

 

Disminución de menores

El ministro Hernán Larraín señala: “Una de las cosas que tenemos que hacer hoy, antes que salga el nuevo Servicio de Reinserción Juvenil y el Servicio de Protección Especializada de Niños, es resolver los problemas de los menores que hoy día están pasándolo mal, donde una vía es trabajar con más énfasis en la revinculación familiar”.

“Pero, además, es importante agregar que la restructuración del Sename pasa también por revisar la forma en que están actuando. En ese sentido, hemos visto que parte de los problemas en los Cread empiezan por la sobrepoblación de niños que existe en ellos. Esto nos obliga a diseñar centros con un número inferior de menores, que sea manejable humanamente, más hogareño y que permita el objetivo que se busca. Para ello vamos a iniciar una serie de planes piloto lo antes posible, para transformar estos centros, que hoy atienden a 80 ó 100 niños, en espacios donde podamos hacer un trabajo más personalizado”.

 

Una Iglesia que incide: Programa Abriendo Caminos y Programa Rehaciendo Vínculos de la Vicaría Pastoral Social

Norma Villanueva, coordinadora arquidiocesana de los programas de cárcel de la Vicaría Pastoral Social, señala con respecto al trabajo del 2018: “Este año los programas se unen y desde este año la intervención se va a mirar como una sola y gran intervención en cárcel y el desafío es mirar un modelo de trabajo que se ajuste a los tiempos actuales, porque hay un cambio de administración en el Gobierno, entonces es un buen momento de poder incidir a nivel político en torno a las necesidades que tienen las familias y las personas privadas de libertad social.

Esperamos generar más acciones de incidencia como lo fue el ‘abrazo de San Miguel’, el año pasado, en donde trabajamos con familias de víctimas del incendio”.

 

Cifras Informe 2018:

  • 53 recintos penitenciarios visitados.
  • 25 de ellos presentan sobrepoblación.
  • 7 establecimientos penitenciarios tienen 14 horas de encierro, otros 34 tienen 15 horas de encierro y 3 presentan 16 horas de encierro, sólo 7 establecimientos poseen menos de 14 horas de encierro.
  • Horarios de las comidas: prácticamente todos los recintos entregan desayuno a las 8:45 o 9:00 horas, almuerzo a las 12:00 horas y cena a las 16:00 horas. En la mayoría no se entrega otra comida hasta el desayuno del día siguiente. Dieciséis horas promedio sin comer.
  • Agua: Sólo 2 tienen agua caliente: Punta Peuco y CDP de Cochrane, 4 tienen suministro parcial de agua.

 

Nueva directora de Gendarmería

El Gobierno anunció que Claudia Bendeck asumirá la Dirección Nacional de Gendarmería de Chile. La elegida es ingeniera y se ha desempeñado por años en el área de Recursos Humanos.

Desde el Ministerio de Justicia señalaron que para Bendeck tendrá principal relevancia el plan de reinserción social y laboral de los ex presidiarios, tanto por el futuro de estos como por la baja en el nivel de reincidencia.

Además, el foco estará en el cuidado de los derechos humanos de los reos, así como mejorar la calidad de vida de los presos. El estado actual de las cárceles es una de las tareas a enfrentar, por lo que se anunció un plan de infraestructura.