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Artículo

Martes 1 de octubre de 2019

En comunidad sin templo Zona Norte inició Mes Misionero

En un sitio eriazo, al aire libre y a todo sol, las parroquias de la Zona Norte dieron inicio al Mes Misionero convocado por Francisco, junto a la comunidad de Valle Grande, de Lampa, vecina a la comuna de Quilicura.

Fotos: Jorge Salomón

Periodista: José Francisco Contreras

Fuente: Comunicaciones Santiago

Link fuente: www.iglesiadesantiago.cl

"Quisimos dar inicio a este mes en esta comunidad que todavía no tiene un templo, como un gesto misionero solidario de varias parroquias de la zona que vinieron acá para acompañarlos", explicó el Vicario de la Zona Norte, padre Ignacio Gramsch. Las precarias condiciones del improvisado lugar de culto no disminuyeron la alegría ni el entusiasmo de estos hermanos.

Familias, jóvenes, agentes pastorales, adultos y personas mayores se congregaron para celebrar la misa este pasado domingo, la que fue presidida por monseñor Alberto Lorenzelli y concelebrada por el vicario zonal y párrocos. El Obispo Auxiliar de Santiago, ante la falta de una iglesia para reunirse la comunidad, afirmó en su homilía que "el templo somos cada uno de nosotros, después viene la construcción material". Y respecto del Mes Misionero, señaló que "el Señor nos pide ponernos en camino anunciando la Buena Noticia que está en nuestro corazón. Porque los cristianos somos el Evangelio viviente con nuestro testimonio".

Luego, el pastor expreso que los cristianos tenemos el desafío de "escribir día a día una página de este evangelio vivo, siguiendo las huellas de Jesús, anunciando la Buena Noticia". Y los invitó a "acercarse a los que más necesitan, a los que se han alejado, a vivir como comunidad, y así podrán después levantar un templo material donde celebrar esta fe".

La Comunidad Jesús Misionero, de Valle Grande, Lampa, es atendida pastoralmente por los religiosos de la congregación Verbum Dei, la parroquia San Juan Pablo II, de Quilicura, vecina al sector. Rodrigo Jeria, coordinador litúrgico de esta comunidad, precisó que este núcleo habitacional en el norte de Lampa tiene alrededor de diez años de existencia, unos 12 mil habitantes y está en permanente crecimiento. "Celebramos la misa dominical en la calle, en algún espacio público, en la capilla del colegio o bajo la lluvia y, además, visitamos las casas de los vecinos. Nuestro gran desafío es construir la capilla, es nuestro sueño, un lugar adecuado donde vivir la espiritualidad y nuestra fe".

El padre Ignacio Gramsch dijo que el terreno donde se celebró la misa podría ser el lugar para una futura capilla, que estará a cargo de la parroquia San Juan Pablo II de Quilicura, pero que a futuro esperan que haya una parroquia para este vasto sector.