Parroquia San Mateo celebró 60 años de vida, renovando la esperanza de su comunidad.

“Mi apostolado aquí, fue un día que se hizo un Vía Crucis, que era muy lindo, y sentí ese llamado, esa fuerza del Señor a participar y a ser parte de esta comunidad. Le doy las gracias a Él, porque he sido bien acogida aquí en la parroquia, con sus altos y sus bajos, como es la vida, pero aquí estamos y seguimos adelante con mucho entusiasmo. Creo que la parroquia ha sido como un oasis dentro de todo, de nuestras pobrezas, de las cosas que nos han sucedido”, relató Miriam Fuentes, agente pastoral hace más de 50 años de esta parroquia y que el pasado domingo 21 de abril participó en la eucaristía por los 60 años de esta parroquia.

Emplazada en un sector histórico, perteneciente a la población San Joaquín, la parroquia San Mateo en Pedro Aguirre Cerda tiene una amplia labor pastoral y diversidad en su territorio. Su misión cotidiana se enfoca en apoyar al sector, con comedores solidarios y talleres para jóvenes, niños y adultos. Actualmente enfrentan el desafío de la partida de su párroco, Narciso Vega, pero mantienen la esperanza en el futuro, aseguran los agentes pastorales que llegaron hasta la sede parroquial a hacer memoria agradecida por estos 60 años de historia.

Entre ellas, Paz Reyes, ministra de comunión, parte del Consejo Pastoral y quien está vinculada a esta comunidad desde los 17 años, indica que han tenido “momentos complicados donde el lugar ha sido un refugio. Hemos tenido otros momentos donde hemos intentado evangelizar mucho. Actualmente contamos con dos capillas, la capilla de San Francisco, la capilla de Cristo Obrero, y una casa de oración, que es en honor a nuestro único diácono que ya partió, que es Manuel Olavarría. Sus hijas continúan el legado y siguen trabajando por nuestra comunidad. Tenemos mucha esperanza en que la parroquia tenga vida para rato, porque es el motor y es la señal hacia el barrio de que Cristo está presente y que, pese a nuestros problemas, acompañados por Cristo, la cosa se hace más fácil”.

Memoria Agradecida por la parroquia San Mateo 

Esta acción de gracias por la historia de esta comunidad,  fue compartida por el Arzobispo de Santiago, monseñor Fernando Chomali, quien presidió esta eucaristía, junto al Vicario de la Zona Sur, padre Manuel Martínez, y el párroco de San Mateo, Narciso Vega.

A la misa también acudieron vecinos y autoridades municipales de la comuna, quienes escucharon el mensaje de Monseñor Chomali, en el que reflexionó sobre la historia que se ha construido junto a esta parroquia, a lo largo de estas décadas, en Pedro Aguirre Cerda. “En estos 60 años, han muerto madres, han muerto arzobispos, han muerto presidentes, han muerto alcaldes, y la parroquia sigue presente. ¿Por qué? Porque Dios acampa aquí. El misterio de la encarnación, de Dios hecho carne, se manifiesta también en la parroquia, la iglesia, el Sacramento de Cristo. Por eso, el mejor servicio que le podemos dar a la comuna, a los representantes, dignos representantes de la misionalidad, es cuidar la parroquia, amar la parroquia, hablar de «mi» parroquia, porque este barrio sería otro sin esta parroquia”.

La fiesta coincidió con la celebración de Jesús Buen Pastor. Oportunidad que fue destacada por el Arzobispo de Santiago, que exhortó a rezar por las vocaciones sacerdotales y a la vida religiosa. “Hoy, es mucho más fácil construir un templo que tener una vocación sacerdotal”, advirtió. Por eso, “necesitamos que ustedes transmitan acá a sus hijos y que recemos por las vocaciones sacerdotales. Sería terrible, que algún día alguien quiera tener un responso y no encuentre algún sacerdote o diácono. Sería terrible. Pero eso no va a pasar. Y para eso tenemos que rezar cada uno de nosotros, para que el Señor envíe operarios a sus mies”, expresó.

Luego, junto al Pan y al Vino, la comunidad presentó nombres de personas que han partido a la casa del Padre y que fueron ejemplo de entrega, amor y servicio a la Iglesia. Asimismo, se ofrecieron al Señor los nombres de todos los sacerdotes párrocos que ha tenido la parroquia durante estos 60 años, quienes han acompañado al pueblo de Dios.

Al terminar la Eucaristía, el párroco Narciso Vega agradeció al Arzobispo de Santiago por acompañar a la comunidad durante este día. Se dirigió a los fieles con sentimientos encontrados, pues estará a la cabeza de la parroquia hasta el 31 de mayo. “Ustedes chilenos tienen la dicha de tener pastores muy humanos y ojalá que eso no pase desapercibido. Aprovecho para no solamente agradecer a don Fernando su presencia, sino también para animarles a ustedes en su vida de fe. Crean en lo que dicen y crean en lo que hacen, porque ustedes, como bautizados, hablan en nombre de Jesús y actúan en nombre de Jesús. Les llevo  en mi corazón, les acompañaré siempre con mi oración, infinitamente gracias”, finalizó el padre Narciso.